Desde el Bósforo hasta el Egeo: visita a Estambul y Bodrum

Si hay un punto de interés que representa a la ciudad, es Santa Sofía, una catedral que se convirtió en una mezquita. Otra ubicación emblemática es la Mezquita Azul, llamada así por sus mosaicos de color vívido. Para explorar otro aspecto de la historia religiosa de Estambul, visite el Museo Judío.

Topkapi, otrora hogar de sultanes, ahora alberga reliquias, joyas y manuscritos otomanos. El 31.º sultán deseaba una residencia más lujosa, así que construyó Dolmabahçe, el palacio más grande de Turquía, con techos dorados e inmensos candelabros de cristal.

Los Museos Arqueológicos de Estambul cuentan la historia del antiguo Oriente, el período otomano y los famosos azulejos y cerámicas del país. También hay varios yacimientos de excavación arqueológica activos para quienes desean explorar las raíces neolíticas y de la Edad de Bronce de la ciudad.

Después de explorar a pie los puntos de interés emblemáticos de Estambul, véalos desde una nueva perspectiva. Navegar por los canales principales de la ciudad ofrece una forma relajante de apreciar su belleza y patrimonio, en especial cuando el recorrido se realiza al atardecer y se acompaña con una cena romántica.

Yalikavak es tanto un pueblo tranquilo como un destino de ocio para la élite. Descubra sus múltiples facetas cuando pasea por las calles adoquinadas del casco antiguo y recorre la glamurosa marina con sus superyates. Descubra opciones gastronómicas rústicas y restaurantes con estrellas Michelin.

El centro de Bodrum se construyó en el sitio de la antigua Halicarnaso, donde se erguía el Mausoleo, una de las siete maravillas de la antigüedad. Después de visitar las ruinas, camine hasta el Castillo de Bodrum, debajo del cual se encuentra el incomparable Museo de Arqueología Submarina.

Apodada la St Tropez de Turquía, la ciudad de Bodrum cuenta con un clima mediterráneo, playas de arena blanca y aguas azules resplandecientes, perfectas para nadar. Las calas y cuevas salpican la costa: explore estas maravillas naturales y las islas cercanas durante un recorrido privado en barco.

La dinámica vida nocturna de la península es realmente variada e incluye jazz en vivo en acogedores cafés y fiestas al aire libre en clubes de playa. El puerto deportivo de Bodrum, con sus numerosos bares y clubes nocturnos, es un destino privilegiado. Mientras tanto, el puerto de Yalikavak ofrece un ambiente más relajado y bohemio.

Turquía es mundialmente famosa por sus alfombras, cerámicas y amuletos de nazar (cuentas con un ojo). Encuentre estos y otros regalos, como especias, dulces, juegos de té, oro y plata, en el Bazar Egipcio o en el Gran Bazar, ambos situados del otro lado del puente Galata desde su hotel.

Mientras se encuentre en la zona de los bazares, puede descubrir restaurantes ocultos, cafés, panaderías y posadas que datan la era otomana, y lo mejor es hacerlo con un guía local. Si le gusta cocinar, tome una clase (o dos) para aprender a hacer mezze, platos tradicionales y postres deliciosos.

El café puede ser una parte indeleble del patrimonio de Turquía, pero el çay es su bebida nacional. La infusión rojiza se prepara en una tetera doble y se sirve en vasos con forma de tulipán, un símbolo de belleza. Disfrute de un té turco en el bar del lobby o en un jardín de té local.

Disfrute de un merecido descanso en un auténtico hammam. The Galata ha restaurado el Çeşme Hamam del siglo XVIII y ofrece a los huéspedes del hotel acceso gratuito, con la opción de añadir terapias de masaje modernas. También hay baños públicos en toda la ciudad.